Últimamente no pongo muchas noches de hogar, no porque no las hagamos, sino porque vamos a casa de los abuelos a hacerlas. A ellos les encanta tener a 5 o 6 nietos para sus mensajes, además de las ventajas que conlleva, que viven enfrente de mi casa, preparan unas pizzas y postres caseros riquísimos y que me hace un mundo ahora que he tenido otro bebe y dispongo de menos tiempo.
Bueno, el caso es que algunas veces son los niños los que toman las riendas de la clase, y Aarón lo ha hecho varias veces... algún día pondré por aquí alguna clase suya. Me encanta que tengan esa oportunidad de prepararse y compartir un mensaje. El coge el libro de leales a la Fe y busca un tema, lee escrituras y explica alguna historia, tanto de las escrituras como propia... es un sol!
Esta semana Aarón tenia el mensaje asignado, pero la academia de música y deberes tuvo su tiempo de preparación ocupado, así que... POR FIN... yo me preparé una clase.
Utilicé un mensaje de la Liahona de Agosto que me había gustado mucho, LA COSECHA, por el presidente Uchtdorf.
En vez de leer la historia de las semillas, la narré como un cuento, y los tenia a todos enganchadísimos. Entonces hablé de la Ley de la cosecha del Señor, como recogemos lo
que sembramos y cosas así. Enseñé unos carteles, que pueden servir cualquiera que tengáis en casa o imprimáis de internet, para ilustrar algunas de las cosas que tenemos que sembrar en nuestra vida para recoger la cosecha más adelante, como prepararnos para bautizarnos, el sacerdocio, la misión, ir al templo, tener una familia eterna, buenos estudios, etc. Cada niño pudo compartir algo por lo que iba a trabajar.
Fue un mensaje sencillo, pero encantador. Lo disfrutamos mucho. Tardamos 10 minutos en hacerlo. Debemos recordar que mantener la atención de los niños todo el rato no es fácil, así que cuanto más pequeños, más breve el mensaje (aunque con adolescentes también se puede cumplir esa regla). Mi suegro, en su afán por hacer una noche de hogar completa y divertida para grandes y pequeños, a veces prepara mensajes de 40 minutos, con vídeos, preguntas, escrituras... y puede ser algo largo ya que los niños se ponen nerviosos y ruidosos, además que se hace tarde para llegar a casa y acostarlos. Así que es sólo un consejito.
Un beso a tod@s
Bueno, el caso es que algunas veces son los niños los que toman las riendas de la clase, y Aarón lo ha hecho varias veces... algún día pondré por aquí alguna clase suya. Me encanta que tengan esa oportunidad de prepararse y compartir un mensaje. El coge el libro de leales a la Fe y busca un tema, lee escrituras y explica alguna historia, tanto de las escrituras como propia... es un sol!
Esta semana Aarón tenia el mensaje asignado, pero la academia de música y deberes tuvo su tiempo de preparación ocupado, así que... POR FIN... yo me preparé una clase.
Utilicé un mensaje de la Liahona de Agosto que me había gustado mucho, LA COSECHA, por el presidente Uchtdorf.
En vez de leer la historia de las semillas, la narré como un cuento, y los tenia a todos enganchadísimos. Entonces hablé de la Ley de la cosecha del Señor, como recogemos lo
que sembramos y cosas así. Enseñé unos carteles, que pueden servir cualquiera que tengáis en casa o imprimáis de internet, para ilustrar algunas de las cosas que tenemos que sembrar en nuestra vida para recoger la cosecha más adelante, como prepararnos para bautizarnos, el sacerdocio, la misión, ir al templo, tener una familia eterna, buenos estudios, etc. Cada niño pudo compartir algo por lo que iba a trabajar.
Fue un mensaje sencillo, pero encantador. Lo disfrutamos mucho. Tardamos 10 minutos en hacerlo. Debemos recordar que mantener la atención de los niños todo el rato no es fácil, así que cuanto más pequeños, más breve el mensaje (aunque con adolescentes también se puede cumplir esa regla). Mi suegro, en su afán por hacer una noche de hogar completa y divertida para grandes y pequeños, a veces prepara mensajes de 40 minutos, con vídeos, preguntas, escrituras... y puede ser algo largo ya que los niños se ponen nerviosos y ruidosos, además que se hace tarde para llegar a casa y acostarlos. Así que es sólo un consejito.
Un beso a tod@s
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